Ante las consultas de la comunidad y entidades patrocinadoras, el Seremi de Vivienda y Urbanismo, Antonio Marchant, junto al director de Serviu, Roberto Grandón, salieron a informar el balance tras los resultados del último llamado del Programa de Protección Patrimonio Familiar, en donde 1.178 familias ñublensinas de nueve comunas fueron favorecidas para mejorar sus viviendas.
“Ñuble ha destacado por sus avances en vivienda y eso es resultado del trabajo mancomunado, nuestro foco han sido las familias y comités que más años llevan esperando una solución habitacional, así que junto a los dirigentes hemos trabajado por destrabar el camino y garantizar el derecho a la vivienda digna y adecuada, lo que nos ha permitido entregar más de ocho mil viviendas y 11.150 mejoramientos del DS255 desde que asumimos la gestión”, destacó el Seremi, Antonio Marchant.
Chillán es la comuna más beneficiada con 968 subsidios de mejora de eficiencia energética y acondicionamiento térmico, lo que representa un 82% de los recursos asignados a la región.
Por otro lado, destacó el papel de las municipalidades de Coelemu, San Nicolás y Quirihue, ya que funcionaron como entidad patrocinadora en las postulaciones de sus habitantes, logrando 125 colectores y paneles solares. Sin embargo, este año se benefició sólo al 22% de los postulantes, ya que hubo más de cinco mil postulaciones.
«En la resolución del llamado 2024 se determinaron más de 300 mil UF para Ñuble. Ahora con los subsidios asignados, las entidades patrocinadoras tienen un plazo de 365 días de ejecución por comité. En el caso de los grupos que no fueron favorecidos, tenemos la disposición para realizar mesas de trabajo y acompañarlos en la próxima postulación de mejoramientos (DS27) que se espera para inicios de agosto«, señaló Roberto Grandón, director de Serviu Ñuble.
La reciente asignación de subsidios de mejoramiento contempla reemplazo de calefactores, sistemas fotovoltaicos, colectores solares y acondicionamiento térmico. El concurso está regido por decreto y la selección se realiza en el nivel central, considerando puntajes y fórmulas que abarcan la antigüedad de vivienda y postulación, el registro social de hogares y la vulnerabilidad del grupo familiar.
