Tres mil autos venían a América se perdieron en el fondo del mar.
Una verdadera emergencia marítima se vive tras el hundimiento del buque Morning Midas, que trasladaba más de 3.000 vehículos nuevos desde China hacia México.
El carguero se fue a pique a 770 kilómetros de las Islas Aleutianas, en Alaska, luego de que un incendio a bordo se saliera de control.
Entre la carga se encontraban 70 autos eléctricos y 680 híbridos, lo que ha despertado gran alarma por las consecuencias que esto podría tener en el ecosistema marino del Pacífico Norte.
El siniestro representa no solo una millonaria pérdida económica, sino también una posible catástrofe ambiental, especialmente por el riesgo de filtraciones de litio, aceites y baterías al océano.